Proteja a su familia con el mejor escudo natural
Ganoderma tiene también efectos inmunomoduladores debido a los diversos componentes activos hallados en él, tales como polisacáridos, triterpenoides y proteínas. Se ha comprobado que estos ingredientes poseen un fuerte efecto inmunomodulador sobre nuestro sistema inmunológico.
Su efecto intensifica la función de las células T, que se encargan de identificar a los virus y los atacan para combatir infecciones, previenen tumores mejorando la circulación y eliminan los radicales libres dañinos. Se ha demostrado que disminuyen la reproducción de metástasis en células cancerosas.
A todos los seres vivos pueden atacarlos agentes causantes de enfermedades. Incluso las bacterias, tan pequeñas que un millón de ellas cabrían en la cabeza de un alfiler, tienen sistemas de defensa contra las infecciones por virus. Este tipo de protección se hace más sofisticado conforme los organismos se hacen más complejos.
Los animales multicelulares tienen células o tejidos que enfrentan exclusivamente la amenaza de infecciones. Algunas de estas respuestas son inmediatas, de tal manera que un agente infeccioso pueda contenerse rápidamente; otras son más lentas, pero también más específicas para el agente infeccioso. De manera colectiva, a esta protección se les conoce como sistema inmunológico.
El sistema inmunológico humano es esencial para nuestra supervivencia en un mundo lleno de virus potencialmente peligrosos, y un deterioro grave, incluso de una rama de este sistema, puede hacernos susceptibles a infecciones graves que ponen en peligro la vida.
El consumo de Ganoderma estimula el sistema inmunológico para que produzca las substancias que a su vez, ayudarán a destruir las células malignas, funcionando como inmunorestaurador en individuos con supresión inmunológica suave a moderada. Recientes estudios clínicos apuntan a su efectividad en pacientes de SIDA y de VIH. (2)
Algunos de los componentes del Ganoderma Lucidum con propiedades inmunomoduladoras son polisacáridos como el Lentinan, triterpenes tales como los ácidos ganodéricos y lucídicos, proteínas como Ling Zhi-8 y el germanio orgánico, que ayudan a fortalecer el sistema inmunológico. La acción inmunomoduladora de los polisacáridos de hongos superiores es relevante en tratamientos preventivos de metástasis tumorales (Wasser, 2002). La acción antitumoral se produce por la activación de diferentes respuestas inmunes en el individuo.
Los ácidos ganodéricos y lucídicos, recientemente aislados de Ganoderma, han exhibido citotoxicidad contra el sarcoma del ratón y el carcinoma de células pulmonares del ratón, in vitro. Desde el primer aislamiento de dos tipos de triterpenes, el ácido ganodérico A y B, de la epidermis seca de Ganoderma en 1982 según Kubota et al., más de 130 triterpenes han sido aislados posteriormente de los cuerpos fructíferos, las esporas, el micelio y los medios de cultivo de Ganoderma. También se aisló del micelio de Ganoderma hace unos años una nueva proteína inmunomoduladora, conocida como Ling Zhi-8 (4).
Es importante tener en cuenta que el Ganoderma es la única fuente conocida de estos ácidos ganodéricos bioactivos. Los triterpenes aislados del Ganoderma tienen, además, propiedades anti oxidantes.